Diálogo entre los vírgenes P. y O. I. C., y un experimentado palindromista mexicano en la puerta de un burdel Publicado porÁlvaro Sialer Cuevas23 octubre, 2012Publicado en RelatosEtiquetas:ficción, palíndromo, sexo —Pero… ¿cómo hacemos? —Sí, enséñanos. —¿La saga, P.?, ¿neta? Tú pide a tu puta, O. I. C.; ensártala al atrás, necio, a tu puta, e di: “Puta, ten”. Paga, sal. Que se sepaImprimirMásTwitterFacebookTumblrPinterestCorreo electrónicoMe gusta esto:Me gusta Cargando... Relacionado